sábado, 18 de abril de 2009

Una esperanza para las parejas gay de Nueva York


El movimiento que se esta dando en el Noreste de Estados Unidos por lograr la igualdad de derechos para la comunidad gay se siente cada vez más en Nueva York. Otra vez el gobernador David Paterson esta impulsando una legislación para convertir a este estado en el quinto de la nación donde las parejas del mismo sexo puedan contraer matrimonio.
El jueves 16 de abril Paterson anunció, en compañía del alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, que introducirá en la Asamblea estatal en Albany un proyecto de ley para legalizar los matrimonios gay. De esta forma el mandatario estatal quiere seguir los pasos de Connecticut, Vermont y Massachusetts, al igual que el estado central de Iowa, los cuales ya han aprobado leyes similares y le han otorgado a las parejas del mismo sexo los mismos derechos de los matrimonios entre personas heterosexuales.
Pero esta no es la primera vez que en Nueva York se ve un movimiento de este tipo. Hace dos años se introdujo un proyecto igual, que aunque consiguió la aprobación de la Cámara Baja estatal, fue frenado en el Senado. En esta oportunidad, a pesar de que los demócratas cuentan con mayoría, tampoco se espera que haya mucho éxito en el Senado.
Lo importante es que la presión se esta haciendo sentir y que Nueva York esta siguiendo los pasos para que todos sus ciudadanos cuenten con los mismos derechos civiles sin importar su orientación sexual. Tras la iniciativa de Paterson el debate sobre este asunto se vuelve a encender en este estado, que ha sido pionero y abanderado a nivel nacional en otras luchas por la igualdad de derechos.
Ahora la pelota está en la cancha del legislativo estatal. Ya es hora de que los asambleistas en Albany cambien esa práctica poco democrática de sólo debatir aquellos proyectos de ley que tienen asegurado el respaldo de la mayoría parlamentaria. Nueva York debe seguir manteniendo su liderato como la tierra donde los derechos civiles son respetados, y que mejor manera acabar con la injusticia hacia a las personas gay. Asambleistas y senadores, pónganse a trabajar en serio.