jueves, 25 de junio de 2009

Más neoyorquinos apoyan los matrimonios gay


El duro trabajo que se esta haciendo para lograr que Nueva York se convierta en el séptimo estado del país en aprobar los matrimonios gay esta dando sus frutos. Aunque todavía sigue en el limbo la votación de esta legislación en el Senado en Albany, debido a la crisis política que allí se vive por el control del poder, ya se esta viendo un pequeño cambio de mentalidad en relación a esta polémico tema.
Por primera vez los resultados de una encuesta difundidos esta semana demuestran que los neoyorquinos, aunque por una muy pequeña mayoría, ahora apoyan las uniones de las personas del mismo sexo. Según el sondeo de la Unidad Quinnipiac, 51 por ciento de los votantes registrado está a favor de los matrimonios gay contra 41 ciento que se opone, mientras que los indecisos suman el 8 por ciento.
La importancia de estos datos es que, además de darse a conocer en plena semana del Orgullo Gay, se presentan en momentos en que el debate sobre la posible aprobación de estas bodas en Nueva York esta más candente que nunca. En estos momentos la legislación esta a la espera de ser votada en la Cámara Alta estatal, luego de haber sido aprobada el pasado 12 de mayor por la Asamblea.
El gobernador David Paterson ha amenazado con suspender el sueldo a los senadores si no retoman el trabajo, ya que por la disputa del poder no han sesionado en dos semanas y esto ha impedido que varias leyes estatales sean debatidas y votadas, entre las que esta la del matrimonio gay.
Aunque todos los pronósticos apuntan a que en el Senado no hay una mayoría clara para pasar esta ley, la encuesta de Quinnipiac demuestra que no se pueden peder las esperanzas y que sí se es posible lograr un cambio en la manera de pensar de la gente, incluyendo a los senadores.
Esta es una dura batalla. Tenemos que seguir con el perseverante trabajo como la única forma de darle a entender a las demás personas que nuestra exigencia es un asunto puramente de igualdad de derechos.

martes, 23 de junio de 2009

Semana del Orgullo Gay: Presidente Obama es hora de actuar!


Este lunes comenzó una de las semanas más importantes para la comunidad LGBT de Nueva York: la celebración del Orgullo Gay. Aunque durante todo el mes de junio se realizan en varias partes del mundo actividades y festejos con el mismo motivo, en la Gran Manzana esta celebración tiene un significado especial por ser aquí donde comenzó hace cuarenta años, tras las redadas policiales en el bar Stonewall, el moviendo de la comunidad gay para exigir igualdad de derechos y un espacio digno en la sociedad.
Este año la celebración del Orgullo Gay se festeja en momentos en que esta comunidad ha logrado importantes victorias en esa batalla por los derechos civiles, pero que a su vez han dejado un sabor agridulce porque se ha seguido enfrentando un fuerte rechazo de muchos grupos con intereses específicos, que están luchando para evitar que las personas gay alcance su objetivo de igualdad.
En Nueva York, por ejemplo, el Senado estatal sigue manteniendo estancada una votación que podría convertir a este estado en el séptimo del país que reconozca los matrimonios de personas del mismo sexo. El gobernador David Paterson anunció el lunes que este miércoles exigiría a la Cámara Alta en Albany a tomar una decisión sobre este asunto.
Otra ejemplo que se dio apenas la semana pasada, fue la firma de un memorándum por parte del presidente de Estados Unidos Barack Obama, que extiende algunos de los beneficios a las parejas del mismo sexo de los empleados federales. Pero esta disposición ha sido vista como sólo un gesto simbólico y no un verdadero compromiso del presidente hacia esta comunidad, que le dio un amplio apoyo durante las elecciones.
Aunque los activista LGBT reconocen que la medida es un paso importante, han manifestado su descontento porque consideran que no deja ver un claro compromiso del mandatario en la lucha por los derechos y respeto de las personas gay.
Son varios los temas en los que la comunidad LGTB espera que el presidente Obama tome decisiones concretas, como el caso de la polémica ley no preguntes no digas que solamente permite a los gay servir en las Fuerzas Armadas siempre que no expresen abiertamente su orientación sexual, y también la Ley de la Defensa del Matrimonio de 1996, que es sin duda es una de las disposiciones federales más controversiales que afectan a la comunidad gay.
El mismo Obama admitió, cuando firmo el pasado miércoles la medida sobre los trabajadores federales, que aún queda mucho por hacer en relación a la comunidad LGTB y es por eso que en este mes de la celebración del Orgullo Gay se debe aumentar la presión, no solo hacia su administración sino a todos los sectores sociales, para lograr que las exigencias de igualdad sean escuchadas y se den pasos concretos que permitan que todos los ciudadanos de este país cuenten con los mismos derechos civiles.

jueves, 18 de junio de 2009

Aumenta la violencia contra los gay


La violencia contra la comunidad LGBT sigue imparable en Estados Unidos. Esta semana la Coalición Nacional de Programas contra a Violencia presentó su informe anual, en el cual se destaca que el número de personas asesinadas en incidentes motivados por la orientación sexual aumentó 28% en el 2008, en comparación con el año anterior.
La alarmante estadística, que corresponde a 29 muertes registrada el año pasado, representa la cifra más elevada de asesinatos de miembros de la comunidad LGBT desde 1999, cuando se registró el mismo número de asesinatos.
Pero lo inquietante del reporte no es sólo que se haya dado este aumento, sino que se demostró que cada vez los ataques son más violentos.
Sharon Staple, directora ejecutiva del Proyecto en Nueva York, compartió, al presentar el reporte, una teoría del por qué se ha producido esta situación, algo que debe ser motivo de alarma y alerta para nuestra comunidad. Según Staple, parte de la violencia en el 2008 surgió como una consecuencia directa de que varios de los temas más polémicos de la comunidad gay hayan ocupado la atención pública durante la campaña electoral. Ella puso como ejemplo el debate sobre los matrimonios entre personas del mismo sexo y la ley que prohíbe a los gay servir abiertamente en las Fuerzas Armadas.
Esto demuestra, de una manera inquietante, como la lucha por la igualdad de la comunidad LGBT no es sólo es un asunto de derechos sino un asunto de vida o muerte. Muchos han perdido la vida a consecuencia de esta lucha, y eso, en vez de detener el movimiento por lograr que todos seamos respetados y podamos disfrutar de las mismas leyes, lo que ha hecho es que el movimiento sea más fuerte y decisivo.
La única manera de detener la violencia es seguir dejando que nuestra voz se escuche y que las autoridades castiguen de manera rigurosa los ataques contra nuestra comunidad.

miércoles, 3 de junio de 2009

Victoria en New Hampshire da impulsos a una difícil batalla


Un gran día para New Hampshire y para Estados Unidos. Este miércoles 3 de junio, la Asamblea estatal aprobó una ley que convierte a este estado en el sexto del país en permitir los matrimonios entre personas del mismo sexo.
Este paso dado en New Hampshire es muy significativo, porque sigue demostrando que el movimiento emprendido en el Noreste del país por los activistas de la comunidad LGBT esta dando resultados. Sin embargo, a pesar de lo relevante de esta decisión y del impulso que da a este movimiento, la batalla en la costa Este por lograr la igualdad de derechos para los gay todavía esta lejos de ganarse.
El paso siguiente, y uno de los más difíciles por lo dividido de las posturas, es lograr que en la votación que se realizará en los próximos días en la Asamblea Legislativa de Nueva York no se repita la historia del 2007. En esa oportunidad, la Cámara Baja había aprobado una ley que permitía las bodas gay, pero luego la medida fue derrotada en el Senado.
Pero mientras ese crucial día se aproxima en Nueva York, por ahora debemos celebrar el triunfo en New Hampshire. Aunque es sólo un paso en esta difícil batalla por la igualdad de derechos, es uno que sigue demostrando que el movimiento debe continuar con fuerza como la única forma de conseguir que las personas gay sean tratadas con dignidad y que algún día, no muy lejano, puedan vivir bajo la protección de las mismas leyes que disfrutan el resto de los ciudadanos de este país.

miércoles, 27 de mayo de 2009

California usa la ley para proteger a unos y discriminar a otros


Aunque no fue sorpresa, la decisión de este martes 26 de mayo de la Corte Suprema de California de confirmar la prohibición de los matrimonios entre personas del mismo sexo ha dejado un amargo sabor a decepción y frustración en la comunidad LGBT de Estados Unidos.
A pesar de que la decisión por un lado estableció que las 18.000 bodas que se formalizaron durante el tiempo en fueron legales estas uniones podrán mantener su estatus legal, deja claro que los derechos civiles no son iguales para todos los ciudadanos del mayor estado del país.
Sin duda que la batalla de la comunidad gay de California no terminara allí. Aunque por ahora el máximo tribunal dio el visto bueno a la Proposición 8, la polémica iniciativa que fue llevada a referendo en las pasada elecciones de noviembre y que define el matrimonio sólo entre un hombre y una mujer, todavía quedan algunas recursos que se pueden usar para seguir impulsando la igualdad en este estado. Ya los activistas de la comunidad LGBT han anunciado que estudiarán someter nuevamente a votación popular en un plebiscito, el derecho de los gay a casarse en California.
Aunque es una gran noticia que se resolviera esa situación que mantenía en el limbo a esas 18.000 parejas que lograron casarse cuando las bodas fueron autorizadas en mayo del 2008, a la vez las pone como un ejemplo de como las leyes pueden ser justas para unos e injustas para otros. Es como si la corte decidiera que algunos negros si pueden votar pero otros no.
Cómo es posible que la misma Corte Suprema estatal haya considerado en el 2008 que negarle el derecho a los gay a casare era discriminatorio de acuerdo a la ley, y ahora, un año después, considere todo lo contrario. Esto es un claro ejemplo de como las leyes pueden ser usadas en detrimento de los mismos ciudadanos a los que debería proteger. Es una vergüenza!

domingo, 17 de mayo de 2009

Día Internacional Contra la Homofobia


Este domingo 17 de mayo se conmemora el Día Internacional Contra la Homofobia. Este dia, en 1990, la Organizacion Mundial de la Salud (OMS), suprimio la homosexualidad de su lista de enfermedades mentales. Aunque en muchos paises no se reconoce oficialmente esta fecha, en varias naciones latinoamercianas, incluyendo Cuba, se han realizado masivos actos para exigir a sus gobiernos acciones concretas para detener los actos de violencia y discriminación contra los gay.
En México, por ejemplo, en donde se han reportado en los últimos años mas de 300 asesinatos de personas gay, se realizaron actos callejeros para exigir al Gobierno que reconozca este día.
La lucha contra la homofobia es una de las mas duras de las que la comunidad LGBT tiene que librar. Esto, porque la homofobia esta presenta en todas las áreas de la vida: la familia, el trabajo, las escuelas, etc. Pero cuando son los propios gobiernos los que promueven la homofia, esta realidad se hace aun mas dramática para las personas gay. Una realidad que se vive en todo el mundo, e incluso en algunos países los actos discriminatorios son cometidos por los mismos miembros de los cuerpos policiales.
El jueves 14 de mayor la Asociación Internacional Gays y Lesbianas (ILGA), presento su reporte anual en cual reveló que el ser gay es ilegal en 80 países, de los cuales en cinco, Yemen, Sudan, Iran, Arabia Saudi y Mauritania, se castiga con la pena de muerte.
Estas legislaciones son un claro ejemplo de como la homofobia en muchos casos permite que se violen los derechos humanos de manera abierta y con protección de las leyes. Esto debe cambiar. Mientras mas países reconozcan oficialmente la conmemoración del Día Internacional Contra la Homofobia, se lograra que esta realidad cambie y las personas gay puedan vivir con dignidad en cualquier rincón el planeta.

martes, 12 de mayo de 2009

¿Será Nueva York el número seis?



Los esfuerzos por lograr igualdad para las parejas del mismo sexo en Nueva York están dando sus frutos y este martes 12 de mayo, la Asamblea estatal aprobó una ley que reconoce los matrimonios gay, colocando a este estado en el camino a convertirse en el sexto del país en permitir estas uniones.
Aunque definitivamente estamos un paso más cerca, no se puede cantar victoria todavía. Aún queda un arduo camino por recorrer. La ley aprobada por la Asamblea es similar a una medida votada en el 2007, que luego murió en el Senado estatal. Lo mismo podría ocurrir esta vez, ya que aunque a diferencia del 2007 los demócratas ahora son mayoría en el Senado, todavía no hay un claro apoyo en la cámara alta para aprobar esta ley.
Algo positivo es que incluso miembros de la Asamblea que votaron contra la medida en el 2007, el martes votaron a favor. Si lo mismo ocurre en el Senado, la batalla está ganada, ya que el gobernador David Paterson sin duda firmaría la ley.
Luego que el mes pasado Paterson introdujera de nuevo el proyecto de ley del matrimonio gay para su debate, los esfuerzos para lograr su aprobación en Nueva York se han redoblado y han contado con la influencia positiva de las victorias obtenidas recientemente en Vermont y Maine. A su vez, el pasado jueves, la Asamblea de New Hampshire votó a favor de una ley similar que ahora está a la espera de la firma del gobernador.
Poco a poco la gente en este país tendrá que entender que esta lucha no es un asunto religioso sino de igualdad ante la ley. Aunque son importantes las victorias que se han obtenido ya en cinco estados, desearíamos que esta lucha fuera por un reconocimiento federal total a los derechos civiles de las personas gay.

miércoles, 6 de mayo de 2009

Con Maine van cinco victorias y podrían ser más esta semana


Esta ha sido una semana de importantes triunfos para la comunidad LGBT de Estados Unidos, y podría haber más antes del viernes. Tan sólo un día después de que el concejo municipal del Distrito de Columbia, nombre oficial de Washington DC, aprobara una ley para reconocer los matrimonios gay contraídos en otras partes del país, este seis de mayo el estado de Maine aprobó estas uniones convirtiéndose en el quinto estado de la nación donde las personas del mismo sexo pueden casarse.
En esta misma columna habíamos escrito sobre cómo estos vientos de cambio se estaban sintiendo con fuerza en la región Noreste del país. Con la decisión de Maine, el área de Nueva Inglaterra se ha convertido en una especie de epicentro de los derechos civiles. Tras la aprobación de los matrimonios gay en Maine, Massachusetts, Vermont y Connecticut, sólo faltarían los estados de Rhode Island y New Hampshire. Sin embargo, esto puede cambiar en cuestión de horas, ya que tambien este seis de mayo se debatió una ley similar en New Hampshire que sería presentada para la firma del gobernador antes del que termine esta semana. En el caso de Rhode Island no se espera que alguna legislación sea pasada este año.
Aunque la victoria en Maine no es cien por ciento segura, ya que los grupos opositores podrían conseguir las firmas necesarias para llevar la nueva legislación a un referendo popular, tal como ocurrió en California, la comunidad gay de Estados Unidos sabe que el paso dado en Maine seguirá teniendo efectos positivos en otros estados como Nueva Jersey y Nueva York, donde ya se están impulsando legislaciones similares.
La lucha por la igualdad de derechos debe seguir. Maine es sólo un paso más hacia la meta de lograr que las personas gay dejemos de seguir siendo tratados como ciudadanos de segunda clase y seamos protegidos por las mismas leyes estatales y federales que los demás.

jueves, 30 de abril de 2009

Un paso positivo contra los crímenes de odio


Este miércoles 29 de abril la comunidad gay de Estados Unidos dio un paso más en una batalla en la que ha estado luchando por más de diez años. La Cámara de Representantes aprobó la Ley Federal Contra los Crímenes de Odio, conocida también como el Acta Matthew Shepard.
Esta es una victoria importante por dos razones. En primer lugar, porque ahora la comunidad LGBT se acerca más al objetivo de contar con una legislación federal que reconozca los crímenes cuando son motivados por la orientación sexual de una persona, y en segundo lugar, porque la ley hace nombre a Shepard, un joven gay de apenas 21 años que murió víctima de un cruento ataque producto de la homofobia.
Con esta medida se le otorgan recursos adicionales a las autoridades locales para que puedan investigar de una manera más adecuada los crímenes que tienen como origen la raza, la etnicidad, el sexo, la religión, la nacionalidad, la orientación sexual, la identidad sexual y la incapacidad. Pero quizás uno de los aspectos más importantes, es que con la nueva ley las agencias federales pueden intervenir en una investigación cuando las agencias locales no puedan o se nieguen a actuar ante un crimen de odio.
Ahora la ley debe pasar la aprobación del Senado antes de ser presentada para la firma del presidente Barack Obama. A diferencia de su antecesor George W. Bush, quien hace dos años vetó una ley similar, Obama ha pedido al Congreso que acelere esta medida, asegurando que será una protección más a los derechos civiles.
Las leyes federales actuales sólo permiten la investigación en crímenes de odio originados por la raza, la nacionalidad o religión, y sólo si la víctima estaba realizando a la hora del crimen alguna actividad considera de carácter federal, como ejerciendo el voto.
En octubre de 1998 Matthew Shepard fue maniatado y golpeado en Wyoming por la sola razón de ser gay. Tras su brutal muerte se creó un movimiento para reformar la ley federal contra los crimines de odio, con el fin de que se contemplara a la orientación sexual como una de las causas que se investiguen y se castiguen. Muertes como la de Matthew deben de detenerse y una ley federal de este tipo será sin duda un paso importante para alcanzar ese objetivo.

sábado, 18 de abril de 2009

Una esperanza para las parejas gay de Nueva York


El movimiento que se esta dando en el Noreste de Estados Unidos por lograr la igualdad de derechos para la comunidad gay se siente cada vez más en Nueva York. Otra vez el gobernador David Paterson esta impulsando una legislación para convertir a este estado en el quinto de la nación donde las parejas del mismo sexo puedan contraer matrimonio.
El jueves 16 de abril Paterson anunció, en compañía del alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, que introducirá en la Asamblea estatal en Albany un proyecto de ley para legalizar los matrimonios gay. De esta forma el mandatario estatal quiere seguir los pasos de Connecticut, Vermont y Massachusetts, al igual que el estado central de Iowa, los cuales ya han aprobado leyes similares y le han otorgado a las parejas del mismo sexo los mismos derechos de los matrimonios entre personas heterosexuales.
Pero esta no es la primera vez que en Nueva York se ve un movimiento de este tipo. Hace dos años se introdujo un proyecto igual, que aunque consiguió la aprobación de la Cámara Baja estatal, fue frenado en el Senado. En esta oportunidad, a pesar de que los demócratas cuentan con mayoría, tampoco se espera que haya mucho éxito en el Senado.
Lo importante es que la presión se esta haciendo sentir y que Nueva York esta siguiendo los pasos para que todos sus ciudadanos cuenten con los mismos derechos civiles sin importar su orientación sexual. Tras la iniciativa de Paterson el debate sobre este asunto se vuelve a encender en este estado, que ha sido pionero y abanderado a nivel nacional en otras luchas por la igualdad de derechos.
Ahora la pelota está en la cancha del legislativo estatal. Ya es hora de que los asambleistas en Albany cambien esa práctica poco democrática de sólo debatir aquellos proyectos de ley que tienen asegurado el respaldo de la mayoría parlamentaria. Nueva York debe seguir manteniendo su liderato como la tierra donde los derechos civiles son respetados, y que mejor manera acabar con la injusticia hacia a las personas gay. Asambleistas y senadores, pónganse a trabajar en serio.

martes, 14 de abril de 2009

Que se haga justicia para Angie


El martes 14 de abril comenzó a hacerse justicia en California en el caso de la transgénero hispana Angie Zapata, asesinada en julio del 2008. Es la primera vez que bajo leyes estatales el asesinato de una persona transgénero es catalogado como un crimen de odio.
Angie fue asesinada por ser valiente y contar sin tapujos su realidad. El acusado por este caso, Allen Ray Andrade, confesó que al enterarse de que ella era biológicamente un hombre la golpeó varias veces con un extintor de incendio hasta causarle la muerte. La pareja se había conocido por teléfono y habían acordado encontrarse para una cita en julio del 2008.
Cifras de la Coalición Nacional de Programas en Contra de la Violencia, publicadas en la página web de GLAAD en español, demuestran que el número de actos violentos contra personas gay y transgénero aumentó 24% entre el 2006 y el 2007, sin contar aquellos hechos que no son reportados por el temor de las víctimas. Las mismas cifras también demuestran una duplicación en el número de asesinatos en el mismo período.
Crímenes como el Angie deben de detenerse con leyes más fuertes. Tras el asesinato de Matthew Shepard en octubre de 1998, un joven que fue maniatado y golpeado en Wyoming por la sola razón de ser gay, se introdujo una propuesta para incluir en la ley federal de 1969 contra los crimines de odio a la orientación sexual como una de las causas que se castiguen. Tras haber sido aprobada en la Cámara de Representante, siendo la primera ley en el Congreso que aborda la problemática de los derechos gay, la legislación introducida con el nombre de Shepard se estancó en el Senado en el 2007.
El juicio en el caso de Angie, que durará aproximadamente dos semanas, debe marcar precedentes en la lucha por los derechos humanos. El Congreso en Washington está en la obligación de impulsar la legislación federal contra los crímenes de odio, que incluso el mismo presidente Obama ha indicado que firmaría sin demora. Esto no sólo mandará un mensaje de que atacar a otro ser humano por su condición o preferencia sexual es erróneo, sino que ayudará a las autoridades a investigar y enjuiciar mejor los crímenes de odio. Tras diez años de la muerte de Matthew, ya es hora que la propuesta de ley en su nombre avance y se evite que muchas más personas de la comunidad LGBT, cono Angie, sigan perdiendo la vida por la intolerancia de otros.

jueves, 9 de abril de 2009

Hay esperanza…Massachusetts fue el primero y ya van cuatro: Vermont dice sí.

América está haciendo historia!


Aunque son sólo batallas ganadas en medio de una gran guerra, cada victoria nos acerca más y más a esa gran meta de lograr la igualdad de derechos. Esta semana ha sido realmente histórica para la comunidad gay de Estados Unidos y para aquellas personas que luchan por los derechos civiles. A tan sólo días del fallo de la Corte Suprema de Justicia de Iowa que legalizó los matrimonios gay, este pasado martes 7 de abril se aprobó una ley similar en Vermont.
Con esta decisión, que a diferencia de las anteriores fue producto de una votación del Legislativo estatal y no de un fallo judicial, Vermont se coloca como el cuarto estado del país, tras Connecticut, Massachusetts y Iowa, en aprobar los matrimonios gay. Esta victoria, a su vez, refuerza aún más el movimiento que se viene dando en la costa Este del país en torno al polémico tema de los matrimonios gay, y pudiera ayudar a acelerar el debate de las propuestas de ley que al respeto que ya se han introducido en las legislaturas en Nueva Jersey y Nueva York.
Pero ésta no ha sido la única decisión favorable para la comunidad gay esta semana. El mismo día que Vermont aprobó su legislación, la capital del país también votó a favor de una norma para reconocer los matrimonios gay realizados en otras jurisdicciones. De esta manera, Washington DC se une a Nueva York, que aunque no tienen una ley que permita estas uniones, sí reconoce los derechos que las parejas gay han obtenido al contraer matrimonio en otros estados e incluso otros países.
Ahora es sólo cuestión de meses para ver si las victorias de Iowa y Vermont tendrán alguna influencia positiva en el fallo que la Corte Suprema de California debe emitir antes del 3 de junio, en relación a si es procedente o no la Proposición 8,que fue aprobada en votación popular en las pasadas elecciones de noviembre y que busca cambiar la Constitución estatal para prohibir los matrimonios gay.

domingo, 5 de abril de 2009

Iowa da el sí a los matrimonios gay


Una vez más se hace historia. El viernes 3 de abril Iowa se convirtió en el tercer estado de Estados Unidos, tras Massachusetts y Connecticut, en legalizar los matrimonios gay. Además, a esta pequeña lista se podría sumar esta semana Vermont, cuya Cámara Baja aprobó también el pasado viernes estas uniones, pero ahora hay que ver qué sucederá con el prometido veto del gobernador.
La decisión de la Corte Suprema de Iowa coloca a este estado como el único del centro del país en declarar inconstitucional las leyes que limitaban el matrimonio sólo entre una mujer y un hombre.
Aunque ya han salido voces contrarias a esta decisión, y que han asegurado que empujarán una enmienda a la Constitución del estado, no se espera que esto pueda ocurra sino hasta el 20012.
La comunidad gay de Estados Unidos sigue haciendo historia día a día, con importantes triunfos en la lucha por lograr igualdad de derechos, aunque aún falta mucho por hacer.

sábado, 4 de abril de 2009

Las dos caras de la Europa gay


Europa siempre ha sido vista como uno de los continentes con la sociedad más desarrollada y liberal del planeta. Esto, sin embargo, no significa que los europeos sean personas completamente abiertas y tolerantes a todos los estilos de vida, sin discriminación. Suena como una contradicción…pues así es.
En el tema de los derechos civiles de la comunidad gay Europa presenta dos caras: Una positiva y otra negativa.
Tan sólo el pasado primero de abril, el parlamento sueco aprobó el matrimonio entre personas del mismo sexo, convirtiendo a Suecia en el quinto país europeo, junto a España, Bélgica, Holanda y Noruega, en permitir estas uniones. Esto da una sensación de que Europa se ha convertido en una especia de “paraíso” para las parejas gay, donde las leyes los protegen, evitando que las tradiciones religiosas y culturales se impongan.
Pero hay otra realidad mucho más cruda que enfrentan las personas gay en Europa: la creciente homofobia que está presente en todas las aéreas de la vida social. Un estudio difundido esta semana por la Agencia de Derechos Fundamentales de la UE, reveló que la comunidad LGBT en Europa es objeto de constante de discriminación, hostigamiento y violencia en todo el continente.
El informe, que muestra la cara menos amigable de Europa hacia los gay, señala que la homofobia, representada en ataques físicos y agresiones de todo tipo, es evidente en las escuelas, los centros médicos y hasta en los propios trabajos. Lo peor, es que muy pocos de los delitos de intolerancia son reportados a la policía.
Como ejemplo de esta lamentable realidad, el estudio resalta como las posturas religiosas y políticas en países como Italia, Bulgaria, Hungría y la República Checa, han evitado que logren avanzar normas que otorguen derechos a la comunidad LGBT. También pone como ejemplo los innumerables obstáculos que los organizadores de los actos del orgullo gay deben enfrentar en países como Estonia, Letonia, Bulgaria, Rumania y Polonia.
Esto demuestra la urgente necesidad de que las 27 naciones del bloque europeo empujen una legislación que acabe con la discriminación y proteja la comunidad gay. As su vez, se deben imponer leyes que castiguen de manera rigurosa los actos de violencia. A pesar de grandes avances como el registrado esta semana en Suecia, la otra cara negativa de Europa evidencia que este continente está lejos de ser el “paraíso” para los gay.

domingo, 29 de marzo de 2009

Que Nueva York se contagie de sus estados vecinos


Esta semana es decisiva en los esfuerzos de la comunidad gay por conseguir la igualdad de derechos. En Vermont, Nueva Hampshire y Maine, se realizarán votaciones en las legislaturas locales, para aprobar o rechazar leyes que permitan el matrimonio entre personas del mismo sexo.
Este movimiento que sigue tomando fuerzas en el área de Nueva Inglaterra, con Massachusetts y Connecticut a la cabeza por ser los únicos estados del país donde se permiten los matrimonios gay, también esta sintiéndose en Nueva York, ya que importantes líderes políticos han salido en los últimos días a dar su respaldo públicamente, a pesar de que todavía no se ha visto una acción decisiva que ponga este tema en la agenda legislativa en Albany.
Tras el cambio de postura del senador por Nueva York Charles Schumer, quien hasta hace pocos días sólo apoyaba las uniones civiles, otro quien ha vuelto a dejar bien claro su respaldo a los matrimonios gay es el alcalde neoyorquino Michael Bloomberg.
La semana pasada Bloomberg reafirmó su posición de apoyo este asunto, y dijo durante un evento en el Gay and Lesbian Center en Manhattan, que volvería a pedir a los legisladores estatales aprobar una medida parecida a la alcanzada en los estados vecinos.
Sin embargo, aunque las posturas de los legisladores en el resto de Nueva Inglaterra pudieran estar ejerciendo alguna influencia en sus contrapartes neoyorquinos, el mismo Bloomberg reconoció que Albany no esta lista todavía para aprobar una ley que permita los matrimonios gay.
Si bien en Nueva York se reconocen los derechos de las parejas que haya contraído matrimonio en otra jurisdicción, luego de una orden de mayo del 2008 del gobernador Paterson, todavía no se ha presentado formalmente una legislación para que se apruen estas uniones. En el vecino Nueva Jersey, por ejemplo, donde ya hay una ley que permite las uniones civiles, se ha visto un movimiento más fuerte para presentar antes de fin de este año una ley que permita los matrimonios como tal.
Esperemos que Nueva York se siga contagiando de este movimiento que se está dando en los estados del Norte de la Costa Este, y que los legisladores demócratas, que tomaron el control de la Legislatura estatal tras las elecciones del pasado noviembre, dejen de un lado los artificios políticos con sus contrapartes republicanos y den un paso firme para otorgarles derechos civiles a todos los neoyorquinos por igual.

miércoles, 25 de marzo de 2009

La revolución en Venezuela también es para los gay


La patria de Bolívar ha estado en constante cambio desde que Hugo Chávez llegó al poder hace 10 años, y la comunidad gay venezolana no escapa a ello. Esta semana se anunció que la Asamblea Nacional tiene previsto legalizar las uniones gay, otorgándoles el nombre de “asociaciones de convivencia”.
El artículo estará incluido en la nueva “Ley Orgánica para la Equidad e Igualdad de Género” que el cuerpo legislativo discutirá en una sesión final en los próximos días. Esto sin duda es un gran avance para la comunidad gay venezolana, que como el resto de los gay en Latinoamérica, ha tenido que soportar constantes humillaciones y violencia producto de una cultura machista y una sociedad profundamente religiosa, cuyas creencias impulsan la discriminación hacia este colectivo.
El respeto de los derechos humanos debe ser un baluarte de cada sociedad y gobierno, indiferentemente cualquiera sea su ideología. Es aplaudible que el Gobierno chavista, que ha insistido constantemente en hacer cambios a la Constitución, este buscando que la leyes también amparen a las personas gay, dándoles la oportunidad para que puedan unirse legalmente y disfrutar de los beneficios que las leyes otorgan a las matrimonios heterosexuales.
En otro país de América Latina también se están dando pasos similares para garantizar derechos civiles a las parejas gay. En Costa Rica se anunció ayer que la Sala Constitucional evaluará la forma de hacer un cambio al artículo 242 del Código de Familia, para así permitir las uniones de personas del mismo sexo. El mencionado articulo indica que “la unión de hecho pública, notoria, única y estable por más de tres años entre un hombre y una mujer que posean aptitud legal para contraer matrimonio, surtirá todos los efectos patrimoniales propios del matrimonio formalizado legalmente”. Es esa parte específicamente de “entre un hombre y una mujer”, la que se busca cambiar por “entre personas”, y así darle cabida las parejas gay.
Estos avances son positivos. Pero todavía hay mucho por hacer en Latinoamérica para lograr una verdad igualdad de derechos para las personas gay. Un campo en donde hay mucho trabajo por hacer es en la lucha contra la homofóbica y la violencia.

lunes, 23 de marzo de 2009

El Noreste: el "corredor del amor" para los gay



Esta semana el Noreste de Estados Unidos puede convertirse en el “corredor del amor” para las parejas gay. El Senado de Vermont votó ayer en favor de una ley para legalizar los matrimonios de personas del mismo sexo, medida que de ser aprobada también en los próximos días por la Cámara de Representantes estatal, consagraría a este estado como el tercero del país, tras Massachusetts y Connecticut, en legalizar estas uniones.
Vermont ya ha sido pionero en impulsar los derechos civiles de la comunidad gay. Fue el primer estado del país en aprobar una ley de Uniones Civiles en el 2000, la cual sería reemplazada a partir del primero de septiembre por la nueva legislación que permita los matrimonios como tal. Tras el voto este lunes en el Senado la medida deberá ser ahora debatida por la Cámara, y aunque el gobernador de Vermont Jim Douglas ha dicho que se opone a la misma, no ha dado indicios de que la vetaría.
Pero no sólo en Vermont se está viendo un avance significativo para otorgar derechos iguales a las parejas gay en la costa Este. Esta semana también será puesta a votación una medida para legalizar los matrimonios gay en el estado de New Hampshire.
A parte de Connecticut, en el área tri estatal Nueva Jersey también cuenta con una ley que reconoce las Uniones Civiles y que otorga a las parejas gay derechos similares al matrimonio. Sin embargo, se espera que para el último trimestre de este año, el Estado Jardín también debata una ley para consagrar el matrimonio de personas del mismo sexo.
Es hora de que Nueva York asuma el ejemplo que le están dando sus estados vecinos en el tema de los derechos civiles. Aunque los matrimonios gay no pueden ser realizados en este estado, el gobernador David Paterson ha ordenado que todas las agencias estatales reconozcan a estas uniones que se hayan consumado en otras jurisdicciones. Pero esto no es suficiente, y quizás es por ello que se empiecen a ver cambios de posturas en importantes líderes neoyorquinos en cuanto a los matrimonios gay. Ayer mismo, el senador por Nueva York Charles Schumer dio a entender que ahora sí está de acuerdo con estas uniones. El legislador confirmó su cambio de postura sobre este tema en una declaración escrita enviada al periódico “New York Daily News”.
Este movimiento a favor de la igualdad para las parejas gay que se está viviendo en el Noreste del país puede sentar un gran precedente para que en otras regiones se produzcan cambios sustanciales. En sólo cuestión de días la Corte Suprema de Justicia de California emitirá un fallo sobre la legalidad o no de los matrimonios gay en ese estado, y puede que los casos de Vermont y Connecticut sirvan para que el fallo que se dé sea el más acorde con los tiempos de cambio, que aparentemente, está viviendo la sociedad estadounidense sobre este tema.

miércoles, 18 de marzo de 2009

Obama también es un cambio para los gay


Los vientos de cambio que soplan en Washington también los siente la comunidad LGBT de Estados Unidos. Este miércoles 18 de marzo el presidente Barack Obama dio un paso trascendental para buscar la igualdad de derechos de todos los seres humanos. Revirtiendo la postura de su antecesor, George W. Bush, la nueva administración en la Casa Blanca firmó la declaración de las Naciones Unidas que pide despenalizar la homosexualidad.
Estados Unidos se une de esta forma a otros 66 países, incluidos México y todos lod de la Unión Europea, que condenan la violación de los derechos humanos basado en la orientación sexual. Esto es un gran avance para toda la comunidad gay, pero muy en especial para muchos hispanos que han huido de sus países de origen víctimas de discriminación o prosecución, y que han venido a esta nación en busca una vida mejor.
En 77 países del mundo la homosexualidad es castigada con la ley por ser considerada “ilegal” y hay naciones islámicas donde incluso se sanciona con la pena de muerte. En América Latina son varios los países donde se penalizan a las personas por su orientación sexual.
Aunque esta decisión no implica que la situación de la comunidad LGBT cambiará de la noche a la mañana en Estados Unido, si da esperanzas de que la administración Obama tomará muy en serio la necesidad de impulsar un cambio radical en esta nación, basado en la igualdad de derechos para todos los ciudadanos.
Eso fue algo que Bush no hizo. En el caso de la ONU, su administración argumentó que apoyar la medida sobre la homosexualidad, generaba conflictos con leyes estadounidenses. Sin embargo, el gobierno de Obama ha dejado claro que el firmar el documento de la ONU “no implica asumir obligaciones legales”. Esta postura se enmarca en que en este país se están librando varias batalles principalmente a niveles estatales en relación al tema de los derechos civiles, como el permitirles a los gay contraer matrimonio. A nivel federal también hay varios debates como el que los gay puedan ingresar al Ejercito.
Todavía hay mucho por hacer. La división que se presentó entre los 192 miembros de la Asamblea General de la ONU a la hora de apoyar este documento es sólo una muestra de que la intolerancia seguirá reinando en muchas partes de este planeta. Esperamos que otros países de América Latina sigan los pasos de Obama.

lunes, 16 de marzo de 2009

Por los gay de Latinoamérica


Mientras que el tema de los derechos de los gay se discute en cada rincón de Estados Unidos, desde Carolina del Norte hasta Hawaii, pasando por California y Nueva York, hay otras zonas del mundo donde la comunidad LGTB también está librando una batalla por lograr la igualdad.
América Latina es una de las regiones donde la discriminación hacia los gay es algo cotidiano. Precisamente para hablar de esta problemática, la semana pasada se realizó en la ciudad de Los Angeles una conferencia denominada “Arco Mundial de Justicia”, en la cual se tocaron diversos temas que afectan a los miembros de la comunidad LGTB desde México hasta Argentina.
Sin duda que al igual que en Estados Unidos, en Latinoamérica uno de los puntos más controversiales es el del matrimonio gay. Sin embargo, en algunos países de la región se han alcanzado avances importantes que incluso superan algunos de los logros que se han obtenido en diversos estados de la Unión Americana. Por ejemplo, en Colombia y Uruguay ya se reconoce legalmente a las parejas del mismo sexo, que aunque no es considerado matrimonio, sí se les otorgan derechos como a las parejas heterosexuales en todo el territorio nacional. En el mismo sentido, en algunas regiones de Argentina, por ejemplo, ya se reconocen las uniones civiles.
Pero a pesar de estos avances y otros destacados como la reciente inclusión en las nuevas constituciones de Bolivia y Ecuador de cláusulas explícitas contra la discriminación por la orientación sexual, en América Latina todavía debe haber un gran progreso en relación al tema de la violencia y a la forma en cómo la Iglesia sigue “condenando” a los gay, algo que de alguna manera ayuda a aumentar la discriminación y la injusticia.
Es excelente que se celebren este tipo de conferencias que tratan la problemática de los gay latinos. Pero sería más provechoso, que sea en los mimos países Latinoamericanos en donde se realicen estas discusiones, para ayudar así a impulsar que nuestras sociedades sean cada vez más abiertas y acepten que las personas gay tienen que disfrutar los mismos derechos que cualquier ser humano.

sábado, 7 de marzo de 2009

Los gay no son ciudadanos de "segunda clase"


Sin duda que el tema del matrimonio entre personas del mismo sexo es uno de los más polémicos en la lucha que la comunidad gay libra por conseguir igualdad de derechos. Más que la cuestión de las adopciones o el poder servir en el Ejército, el tema de las uniones gay enciende las pasiones de una manera extrema en los grupos que lo apoyan o rechazan.
Esta controversia está en pleno apogeo en Estados Unidos, principalmente porque en el estado que se considera el más “liberal” del país, California, se está llevando a cabo una batalla legal en la Corte Suprema de Justicia estatal para definir el futuro de la llamada Proposición 8 (una normativa aprobada el pasado 4 de noviembre en las elecciones generales, y que prohíbe el matrimonio gay en este estado).
El pasado jueves 5 de marzo tanto defensores como detractores expusieron sus argumentos ante ese Máximo Tribunal, el cual tendrá 90 días para decidir el futuro de la Propensión 8. En sus manos está determinar si esa mayoría que votó por la norma en las pasadas elecciones –fue aprobada con el 52% de los sufragios- tiene la potestad de quitarle o darles un derechos a una minoría.
Uno de los principales aspectos que hacen del tema del matrimonio gay uno extremadamente controversial, es que además de dilucidar “qué tipo de ciudadanos” son las personas gay, si iguales a todos los demás o son de "segunda categoría", también envuelve el asunto religioso que hace que el debate sea bien polarizado.
Por un lado están los grupos gay radicales, que no aceptan bajo ninguna circunstancia que las uniones del mismo sexo se llamen de otra forma que no sea “matrimonio”, y por otro lado están los grupos religiosos que defienden la postura de que el matrimonio es una “institución sagrada” que define a la familia, la cual, ante “los ojo de Dios”, esta creada sólo por un hombre y una mujer.
Ambas partes deben entender que lo importante en este asunto no es si a las uniones gay se les llama matrimonio o no. Aquí, lo fundamental es reconocer que las personas gay deben tener los mismos derechos que cualquier ciudadano a casarse con su pareja. Estas uniones deben ser reconocidas bajo las leyes estatales y federales y permitirles gozar de los más de 1.000 beneficios y derechos que otorga la Constitución a las parejas heterosexuales.
En California existen ahora unas 18.000 parejas gay que están en el limbo en medio de esta polémica. La Proposición 8 enmendó la Constitución estatal para contrarrestar una decisión de mayo del 2008 de la Corte Suprema, que legalizó el matrimonio gay al ratificar que negar el derecho al casamiento a las parajes del mismo sexo era una violación inconstitucional a los derechos civiles. El jueves este mismo tribunal escuchó argumentos en tres puntos: si la Proposición 8 no es inconstitucional, entonces cual será su efecto en las parejas que se casaron antes de su aprobación; si la Propuesta 8 es inválida ya que es sólo una revisión de la Constitución estatal y no una en enmienda a la misma; y si además viola la doctrina de la separación de poderes amparados en la Constitución estatal.
Esperamos que la Corte Suprema de Justicia de California vuelva a tomar esta vez una decisión sensata, que no debe ser otra que el terminar con la discriminación y demostrar que no deben existir ciudadanos de “segunda clase”, con menos derechos que otros.
Pónganle el nombre que quieran: matrimonio, uniones civiles o casamientos. Lo importante es darle a los gay derechos fundamentales, y que sus relaciones de pareja tengan los mismos beneficios de las uniones heterosexuales, como la visitas en hospitales, la herencia e incluso leyes migratorias. Todos los ojos de la nación están sobre este estado. Esperemos que California de el ejemplo.

martes, 3 de marzo de 2009

Harvey Milk: un héroe que merece ser reconocido


La mayoría de las personas asocian a los héroes con individuos que han logrado importantes proezas principalmente el área militar. Este es el caso de los próceres que lucharon por la Independencia o los soldados que a diario arriesgan su vida en lugares como Irak. Pero tal y como lo describe el diccionario, un “héroe es toda persona que ha realizado una hazaña admirable y para la cual se requiere mucho valor”.
Así como Martin Luther King, Jr. es considerado un héroe del movimiento por los derechos civiles de los negros en EEUU, Harvey Milk es visto como una de las principales figuras de la lucha por la igualdad para la comunidad gay. Aunque para muchos era un personaje desconocido antes de que saliera la película “Milk”, incluyendo a las nuevas generaciones gay en este país, su causa ya lo había colocado en la historia como uno de los héroes del “movimiento gay”.
Es por ello que este martes 3 de marzo el actor Sean Penn, quien el pasado 23 de febrero ganó un Oscar como mejor actor por su interpretación de Harvey Milk, introdujo junto a un grupo de activistas y políticos locales una legislación para que el estado de California reconozca oficialmente el “Día de Milk”, que coincidiría con la fecha de su nacimiento. El año pasado, cuando se cumplían 30 años del asesinato de Milk en la Alcaldía de San Francisco, el gobernador de California Arnold Scharzenegger vetó una legislación similar. Argumentó entonces, que Milk debería ser honrado sólo en San Francisco y no a nivel estatal.
¿Será que la lucha de King Jr. sólo se debería conmemorar en Atlanta, donde nació, o en Washington a donde llevó su movimiento? No es que estemos comparando la proeza de ambos líderes, sino la injusticia en reconocer como las aspiraciones de uno y otro por lograr la igualdad trascendió más allá de los lugares geográficos donde sus movimientos tuvieron su epicentro. Tras tres fracasos electorales Milk fue electo en 1977 como miembro de la Juta de Supervisores de San Francisco, convirtiéndose en la primera persona abiertamente gay en ocupar un cargo público de importancia a nivel nacional. El fue un héroe, no sólo para los gay de San Francisco, sino para familias heterosexuales, ancianos y personas de clase trabajadora que le dieron su voto, porque vieron una posibilidad de lograr mejoras en sus vidas así como leyes justas que los protegieran. Para las nuevas generaciones también es un héroe, por abrir las puertas que han permitido a la comunidad gay logra una mayor presencia política y a su vez impulsar de una manera más efectiva el movimiento por la igualdad.
Algo que el gobernador Scharzenegger quizás no entienda, es que gente apasionada en la luchar contra la discriminación como fue lo Milk, han sido las que han permitido que, por ejemplo, un inmigrante pueda ver como se hace realidad su “Sueño Americano” e incluso llegue a convertirse en el gobernador del estado más grande del país más poderoso del mundo. Harvey Milk merece ese reconocimiento.

domingo, 1 de marzo de 2009

Argentina da un paso positivo hacia la igualdad


La lucha por la igualdad y reconocimiento de los derechos de la comunidad gay es extremadamente difícil. En lugares como América Latina, por ejemplo, esta batalla es aún más dura debido a los prejuicios culturales y religiosos. Es por ello que se debe elogiar de manera especial cuando en algún país latinoamericano se dan pasos, por pequeños que sean, para lograr esos objetivos.
Esta semana se anunció en México que Miguel Galán buscará convertirse en el primer alcalde gay del país. El político de 31 años aspirará el próximo 5 de julio a la alcaldía de Guadalajara, la mayor ciudad del estado de Jalisco, con más de 3 millones de habitantes. Otra noticia aún más trascendental para nuestra comunidad, es la entrada en vigor esta semana en Argentina del nuevo Código de Justicia Militar, que erradica el castigo de prisión por homosexualidad que en el viejo código, que estaba vigente desde hacía 58 años, era visto como un “delito de honor”.
El que las personas puedan ingresar a la carrera militar sin tener que esconder su orientación sexual rompe con uno de los mayores tabúes de la sociedad: el aceptar que sí hay gay en las fuerzas armadas.
Estados Unidos es un claro ejemplo de la discriminación en las filas castrenses. En este país no se puede ser “abiertamente gay” en el Ejército. Y aunque con la ley “Don’t ask, don’t tell” (No preguntes, no digas) introducida por el entonces presidente Bill Clinton en 1993 se ha permitido a los gay entrar en la carrera militar, todavía sigue vigente la prohibición explícita de la homosexualidad en la institución armada.
Esta ley federal imposibilita a cualquier gay o bisexual revelar su orientación sexual mientras estén sirviendo, y por otra parte prohíbe a los superiores preguntar directamente o iniciar cualquier investigación sobre la sexualidad de un subordinado.
Pero aunque con “Don’t ask, don’t tell” los aspirante a militar no han tenido que mentir más para ingresar y seguir en el Ejército, por otra parte los obliga a mantener “en secreto” su orientación sexual y cualquier relación gay. Es un doble estándar que no ha frenado la discriminación y evitado que soldados que incluso han arriesgado su vida en Irak y Afganistán sean expulsados. Argentina ha dado un paso positivo en el camino hacia la igual de los seres humanos, al tomar una decisión que celebramos y que debería servir de ejemplo para la nueva administración en Washington que se ha jactado de presumir que será un gobierno del cambio, un cambio del cual la comunidad gay también espera beneficiarse.

sábado, 28 de febrero de 2009

No hay que ser gay para morir por la homofobia


La discriminación y la violencia hacia los gay no es algo nuevo. Han estado presentes desde el mismo día, quien sabe hace cuanto, que las primeras personas empezaron a “salir del closet” en busca del reconocimiento e igualdad. Y aunque no se puede dudar que ha habido avances en esa búsqueda, cada día nos enfrentamos a casos atroces contra la comunidad LGTB que nos hacen seguir preguntándonos…hasta cuándo?
La ciudad de Nueva York, la metrópolis más diversa del mundo, donde convergen todas las nacionalidades, razas, religiones y estilos de vida, tiene, sin embargo, un largo historial de ataques de odio contra personas gay.
El más reciente, que paradójicamente envuelve a un par de hermanos ecuatorianos heterosexuales, ha consternado a la comunidad gay e hispana de la Gran Manzana por su crudeza.
El caso es paradójico, porque aunque las victimas no son gay, los motivos del ataque tienen un claro origen en la homofobia de los ejecutores.
El pasado 7 de diciembre José Sucuzhañay, de 31 años, y su hermano Rommel salieron de una fiesta en Brooklyn y debido al frío iban abrazados. Eso fue suficiente para que sus agresores los confundieran con una pareja gay y decidieran atacarlos. Hakim Scott y Keith Phoenix, ambos afroamericanos, les gritaron insultos anti-gay y golpearon a José en la cabeza con un bate de aluminio y una botella de cerveza. El joven inmigrante ecuatoriano murió una semana después del ataque en un hospital en Queens. Rommel logró huir durante la agresión y salvar su vida.
Sucuzhañay era un padre heterosexual con dos hijos en Ecuador. Ahora su muerte quedará como un ejemplo más de cómo cualquier persona, sin necesidad de ser gay, puede perder la vida víctima de la intolerancia de otro.
Lamentablemente la homofobia no sólo se refleja en hechos de violencia y está presente en actitudes más “moderadas” como un simple comentario en la calle, una burla o los chistes entre compañeros de oficina. Muchos incluso rechazan ser ho mofóbicos porque nunca han atacado a un gay, pero dejan que sus prejuicios se im pongan a la hora de negarle un servicio a otra persona sólo por su apariencia o ma nera de hablar. Eso también es homo fobia.
Ser gay no es fácil. Aunque se lleva una vida normal igual que cualquier ser humano, con alegrías y tristezas, triunfos profesionales y altibajos personales, en muchos casos hay que lidiar con grandes obstáculos en la vida para conseguir la igualdad y los mismos derechos que cualquier persona. Pero quizás lo más duro es coexistir en un mundo donde persiste la intolerancia y sobre todo la violencia.