En una reunión de líderes de los Boy Scouts de América se votó ayer a
favor de aceptar el ingreso de niños gays a esta organización. Y aunque la
decisión no fue del todo positiva, ya que no se aprobó que los adultos gays puedan
ser líderes de los explorados, sí demuestra que día a día estamos ganando
pequeñas batallas por lograr que las personas gays sean tratadas con igualdad.
La decisión de los Boy Scouts se produce luego de un movimiento nacional
para que esta organización abandonara una práctica considerada discriminatoria,
que había sido condenada incluso por el mismo presidente de EEUU Barack Obama.
En la reunión anual de los exploradores realizada en Texas, el 60% de
los miembros votó a favor de admitir en la organización a los pequeños que tienen
una orientación sexual diferente. Sin embargo, la decisión no ha estado exenta
de controversia, ya que algunos miembros consideran que provocará deserciones
de niños que no son gays, ya que sus padres no admitirán que se relacionen con aquellos
que sí lo son.
El eliminar esa norma que prohibía el ingreso de los jovencitos gays ha
sido un paso valiente de los exploradores, y aplaudimos el que haya prevalecido
razón, a pesar de la fuerte presión que han ejercido diferentes grupos,
incluyendo la iglesia, que han amenazado con incluso eliminar los aportes financieros
que hacen a esta organización.
Y aunque la decisión de los Boy Scouts no terminará con esta polémica,
esperamos que sí incite a que otros grupos y organizaciones que tienen
políticas discriminatorias también empiecen a considerar el cambiar sus reglas,
para que la igualdad sea la nueva consigna.
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